171
Kioxia (filial de Toshiba, Japón), junto con la estadounidense Hewlett Packard Enterprise, desarrolló y envió a la ISS una unidad SSD de estado sólido compuesta con una capacidad total de 130 TB. Está diseñada para el ordenador orbital HPE Spaceborne Computer-2.
Publicidad
Según Kioxia, el dispositivo se basa en tecnología comercial disponible en el mercado y consta de cuatro unidades SSD SAS de 30,72 GB cada una. Anteriormente, hasta que la ISS dispuso de su propio superordenador local, la tripulación de la ISS tenía que enviar toda la información científica a la Tierra para su procesamiento.